
La Comisión Canadiense de Derechos Humanos (CHRC, por sus siglas en inglés) sigue preocupada por el hecho de que, en todo Canadá y en el mundo, las personas son cada vez más vulnerables a los efectos sanitarios, económicos y sociales de la crisis climática. Para muchos jóvenes, el cambio climático es el tema que define su generación, y en Canadá, una gran mayoría de niños, niñas y jóvenes no solo están conscientes del problema, sino que también les preocupa profundamente.
En octubre de 2021, el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas adoptó una resolución que, por primera vez, reconoció formalmente el derecho a un medio ambiente seguro, limpio, saludable y sostenible como un derecho humano. También destacó que los impactos de la degradación ambiental en los derechos humanos afectan de manera más grave a quienes ya se encuentran en situaciones de vulnerabilidad, incluyendo a los pueblos indígenas, las personas mayores, las personas con discapacidad, y las mujeres y niñas. La CHRC subraya, además, que las preocupaciones ambientales pueden generar efectos negativos adicionales y acumulativos en las comunidades marginadas debido a la desigualdad socioeconómica y el racismo ambiental. Como lo señala nuestro informe más reciente, las comunidades indígenas, afrodescendientes y otras comunidades racializadas a menudo enfrentan racismo ambiental, ya que vertederos, basureros y otras actividades peligrosas para el medio ambiente suelen ubicarse desproporcionadamente cerca de sus barrios, lo que genera graves riesgos para la salud.
La CHRC también comparte la preocupación de que muchas políticas y prácticas actuales de mitigación, preparación y respuesta ante la crisis climática en curso no contemplan de manera adecuada las necesidades de las comunidades marginadas. Por ello, seguiremos recomendando que las iniciativas, políticas y programas relacionados con la acción climática, la protección del medio ambiente y las respuestas ante emergencias incluyan de manera efectiva a las poblaciones más afectadas en todas las etapas: desde la planificación hasta la implementación y evaluación.
La CHRC reafirma su compromiso de seguir impulsando avances en la protección de los derechos humanos, incluyendo su trabajo conjunto y colaboración con su red regional: la Red de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos del Continente Americano (RINDHCA).
Charlotte-Anne Malischewski
Comisionada Jefa Interina
Comisión Canadiense de Derechos Humanos
Human Rights and the Environment
The Canadian Human Rights Commission (CHRC) remains concerned that across Canada, and around the world, people are becoming increasingly vulnerable to the health, economic and social effects of the climate crisis. Many young people cite climate change as the defining issue of their generation, with a large majority of children and youth in Canada both environmentally aware and concerned.
In October 2021, the United Nations Human Rights Council passed a resolution formally recognizing – for the first time – the right to a safe, clean, healthy and sustainable environment as a human right. The resolution also recognized that the human rights implications of environmental damage are felt most acutely by those that are already in vulnerable situations, including Indigenous peoples, older persons, people with disabilities, and women and girls. The CHRC further notes that environmental concerns can have additional and compounding negative effects on marginalized communities due to socioeconomic disadvantage and environmental racism. As our recent report notes, Indigenous, Black and other racialized communities often experience environmental racism whereby landfills, waste dumps and other environmentally hazardous activities are disproportionately situated near their neighborhoods, creating serious health risks.
The CHRC also shares concerns that existing mitigation, preparedness and response policies and practices with respect to the ongoing climate crisis are not inclusive of the needs of marginalized communities. This is why the CHRC will continue to recommend that climate and environmental action and emergency initiatives, policies and programs meaningfully include disproportionately impacted populations at all stages of planning, implementation, and evaluation.
The CHRC remains committed to ensuring continued progress in the protection of human rights, including through its collaboration and partnership with its regional network: the network of NHRIs of the American Continent (RINDHCA).
Charlotte-Anne Malischewski
Interim Chief Commissioner
Canadian Human Rights Commission