El Salvador es un escenario de varios movimientos humanos que lo posicionan como país de origen, tránsito, destino y retorno de flujos migratorios en donde convergen tanto personas residentes como en tránsito y trabajadores transfronterizos, migrantes centroamericanos y de otras partes del mundo, personas salvadoreñas retornadas en condición de vulnerabilidades y con necesidad de protección nacional e internacional.

Desde la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, se reconoce el papel fundamental de las personas migrantes salvadoreñas en el exterior, así como el aporte de personas extranjeras y trabajadoras migrantes en nuestro país. De igual manera, se reconoce que existen situaciones que ponen en condiciones de vulnerabilidad a las personas migrantes en los países de origen, tránsito y destino, entre ellas: las condiciones climáticas adversas, la xenofobia, políticas de militarización, asesinatos, desapariciones, robos, secuestros, trata de personas, tráfico ilegal y otras violaciones a derechos humanos como prácticas sistemáticas, que se realizan en los territorios y en las zonas fronterizas.

Ante el panorama actual y cambiante de la migración se hace indispensable que la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, desde su mandato Constitucional de velar por el respeto y garantia de los derechos humanos mantenga la observancia de las condiciones de El Salvador como país de origen, tránsito y retorno de la movilidad humanas, especialmente desde la Procuraduría Adjunta de Personas Migrantes y Seguridad Ciudadana, con la labor operativa del Departamento de Atención a Personas Desplazadas y Personas Migrantes.

La Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, reafirma mediante este documento, su tarea de proteger y tutelar los derechos de las personas sin importar su condición migratoria; de visibilizar y señalar prácticas que excluyen a las personas migrantes en mayor condición de vulnerabilidad; de estar y acompañar los procesos para garantizar sus derechos de acuerdo con las realidades.

El presente informe recoge en sus apartados iniciales el marco que sustenta la pertinencia de la actuación de la PDDH, algunos conceptos fundamentales para la comprensión del contenido del informe y una descripción bastante general de la metodología implementada para obtener los insumos que se vierten en el texto. Luego, se presentan organizados en razón de las poblaciones, los hallazgos del ejercicio de diagnóstico realizado: a. los relativos a las personas extranjeras en el país, incluyendo aquellas en condición de irregularidad, así como las solicitantes de protección internacional y refugiadas; b. los relativos a las personas retornadas con necesidades de protección; y c. los relativos a la población transfronteriza.

Cerrando el documento con algunos hallazgos puntuales correspondientes a las visitas a fronteras y puntos fronterizos no habilitados; y finalmente, consignando las conclusiones y recomendaciones.

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